La Comisión Federal de Comercio de EE. UU. está reembolsando unos diez millones de dólares estadounidenses a las personas que invirtieron en el proyecto de fraude de Belize Sanctuary Bay. Según la FTC, cerca de mil doscientos cheques se envían por correo con un promedio de poco más de ocho mil dólares estadounidenses. El proyecto Belize Sanctuary Bay fue un desarrollo de terrenos que ofreció a los inversionistas un sueño de desarrollo de lujo que nunca se hizo realidad. El plan que se comercializaba hablaba de condominios, piscinas privadas, con instalaciones de spa y similares, pero eso nunca sucedió. Muchos de los inversores que fueron estafados eran ciudadanos estadounidenses, lo que obligó a la FTC a involucrarse. Luego de un juicio en 2020, la FTC obtuvo un veredicto de que el esquema recaudó más de 100 millones de dolares. Como determinó el tribunal, los demandados engañaron a los consumidores para que compraran lotes en Sanctuary Belize al afirmar falsamente que sería una inversión segura, que el desarrollo incluiría comodidades de lujo y se completaría pronto, los consumidores podrían revender sus lotes. El tribunal dictaminó que Andris Pukke y su socio, Peter Baker y John Usher, engañaron a los consumidores que invirtieron en Sanctuary Belize al prometerles que estaban invirtiendo en un desarrollo y resort de lujo. Los hombres apelaron la decisión, pero el Tribunal de Apelaciones confirmó que se trataba de un esquema engañoso y, posteriormente, ordenó que se pagaran rondas iniciales de reembolsos.